¿De dónde vienen?
Inteligencias que se desarrollan
- Inteligencia naturalista
- Inteligencia visual/espacial
- Inteligencia lógica/matemática
- Inteligencia lingüística
Contenidos del juego
Conocimiento de sí mismo y autonomía personal
- Ejercitación progresiva de hábitos que favorezcan la relación con los demás: cuidados, atención, escucha, diálogo y respeto.
- Autorregulación progresiva de hábitos de autonomía y rutinas referidos al cuidado del cuerpo: higiene, descanso, alimentación, seguridad.
Conocimiento del entorno
- Observación e identificación de diferentes elementos del entorno: materiales, objetos, animales, plantas, paisajes.
- Observación de características de algunas animales y plantas en contextos diversos.
- Comparación, ordenación y clasificación de objetos y material, estableciendo relaciones cualitativas y cuantitativas, para reconocer patrones, verbalizar regularidades y realizar anticipaciones.
Lenguajes: comunicación y representación
- Uso de estrategias para comprender a los demás cuando se expresan verbalmente, adoptando una actitud positiva y de respeto hacia las lenguas.
Descripción del material
El panel, las tarjetas de la serie “Animales” del cerdo, pez, abeja, vaca, gato, y las tarjetas de la serie “Alimentos”.
Instrucciones del juego
El juego consiste en descubrir y ordenar asociaciones.
En el aula, el juego se puede desarrollar de dos formas diferentes, por un lado haciendo grupos y, por otro lado, sin hacerlos.
El adulto hará dos grupos de cuatro o cinco niños aproximadamente y repartirá ocho tarjetas a cada uno, cuatro de animales y cuatro de alimentos. Los niños tendrán que unir las tarjetas por parejas en un tiempo determinado, relacionando cada alimento con el animal o el vegetal de que proviene, de modo que les salgan cuatro parejas; una vez finalizado el tiempo de asociación, cada grupo tendrá que poner sus parejas en algún soporte (cartulina grande, pizarra, mesa, etc.) para que uno de los participantes explique la razón por la que han establecido esas asociaciones. En el caso de que alguna de las asociaciones sea incorrecta, el adulto iniciará un diálogo con los niños mediante la formulación de preguntas para llegar entre todos a la conclusión correcta.
El adulto colocará las tarjetas boca abajo en el suelo o en la mesa. A continuación, los niños de uno en uno por turnos destaparán dos tarjetas, una de animales y otra de alimentos. En el caso de que sean pareja, es decir, que el alimento provenga del animal, el niño se quedará con ambas tarjetas, y en el caso de que no sean pareja, el niño las volverá a dejar boca abajo en el suelo. El juego lo ganará aquel niño que consiga más parejas. En el caso de que alguna de las asociaciones sea incorrecta, el adulto iniciará un diálogo con los niños mediante la formulación de preguntas para llegar entre todos a la conclusión correcta.
En ambas formas de realizar el juego, se podrá añadir dificultad incluyendo una pareja que no tenga sentido (por ejemplo, gato/caramelo). En este caso, el adulto avisará a los niños de que hay que tener cuidado porque hay parejas que no tienen sentido.